“Ellos son mi vida, la razón por la cual yo me muevo día a día”, Don Gervacio, un padre que nos inspira.
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Hace 2 meses conocimos a Filip Kobiec, un joven de 20 años que llegó desde Varsovia, Capital de Polonia, para vivir su experiencia de voluntariado con Dequení. Si bien ya había tenido otras experiencias anteriores dedicando su tiempo y su talento a los niños a través del voluntariado; esta vez lo vivió de forma diferente.
“Es mi segunda vez haciendo voluntariado, pero es mi primera experiencia con los niños. Aprendí mucho con ellos, y no solo en clases de matemáticas o inglés, sino compartiendo momentos valiosos; jugando fútbol y divirtiéndonos” afirma Filip.
Según su propio testimonio, cuenta que acompañar a los niños del proyecto “Casa de Acogida” de Dequení, con clases de refuerzo escolar, ofreciendo su conocimiento y compartiendo su tiempo; fue algo que le cambió la vida.
Después de terminar sus estudios secundarios en su país natal, Filip cambió sus planes de seguir una carrera universitaria y decidió venir a Paraguay por medio del Movimiento de Schoenstatt del cual forma parte. Dicha experiencia le ayudó a valorar la importancia de realizar acciones solidarias, brindando un poco de lo que él recibió a otros niños; dándole a conocer también sobre sus costumbres y su cultura.
“Los niños se muestran muy interesados en la cultura de mi país, siempre quieren saber más y me preguntan. Una vez, una niña me pidió que ubique a mi país de origen, Polonia, en el mapa Europa y luego de 3 días vino con un dibujo de lo que le había mostrado, para mí fue emocionante y significativo”.
El voluntariado le dio una nueva visión de su propia vida a Filip, sobre sus objetivos y sus sueños. Hoy después de 2 meses, que al parecer fueron pocos, lleva muchos recuerdos que quedarán para siempre, como él mismo lo expresa. Regresa a su país, pero con la fuerte convicción de volver.
Actualmente planea estudiar la carrera de teología y empezar un nuevo camino hacia sus metas personales, sin dejar de lado su espíritu generoso y solidario para extender sus manos y su conocimiento cuando sea necesario, animando a otras personas a donar su tiempo y su talento a una causa noble: la educación de los niños.
“Si quieren vivir en grande, sueñen en grande y ayuden a los demás, vivan esa aventura dando un poco de uno mismo a otras personas”
Voluntarios de todas las edades y profesionales que deseen colaborar como voluntarios en los proyectos de la Fundación o en la organización de eventos solidarios, pueden escribirnos a voluntariado@dequeni.org.py
