Exitoso McDía Feliz: para niños con más oportunidades
13 diciembre 2024De los miedos a los sueños: la historia de Elías
18 diciembre 2024Charlotte tiene 8 años, cursa el segundo grado y asiste a la Escuela María Adolfina Lugo en Ypané. Vive con su mamá, Diana, y su hermanito menor, Liam. “Charlotte es mi compañera de vida, una niña muy alegre que me ayuda en todo”, dice Diana con una sonrisa. Cada mañana, madre e hija desayunan juntas, preparan el tereré y se encargan de los quehaceres de la casa. Charlotte siempre muestra mucho entusiasmo por colaborar y apoyar a su mamá en todo, aun con su corta edad.
Diana es mamá soltera y actualmente se dedica a la venta de bijouterie de manera independiente; así saca adelante a su familia a diario.
Después de almorzar, Charlotte camina a la escuela, que queda cerca de su casa. Su risa contagiosa y se escucha a lo lejos al llegar a la institución. Entre sus materias favoritas, están: Comunicación, Matemática y Guaraní. En la escuela y en su casa, ella disfruta especialmente de las actividades donde puede explorar su creatividad: el canto, el baile y la lectura de cuentos.
En su escuela, Dequení desarrolla el proyecto Ludolecto, un proyecto que fomenta la lectura y escritura a través del juego, y que ha sido clave para su aprendizaje. Al principio, la adaptación fue un desafío para ella, ya que provenía de otra institución, y los cambios no le resultaron fáciles. Le costaba socializar con sus compañeros, además de algunas dificultades con la lectura fluida y la identificación de letras similares, como la “b” y la “v” o la “c” y la “s”. Con el acompañamiento constante de Dequení fue fundamental en su desarrollo educativo.
Dequení lleva este proyecto a escuelas públicas a través de animadores y promotores educativos; quienes llegan a las aulas en una hora determinada para brindar acompañamiento a los niños y apoyo a los docentes: en la escuela María Adolfina Lugo, es la profe Celina.
Su maestra de grado es la profe Gloria, quien cuenta acerca de esta experiencia con Charlotte y como fue su desarrollo escolar este año. “Ella es una niña muy aplicada y mejoró bastante en la lectura y escritura”. Lo más emocionante para su profe y su mamá es que este año Charlotte además de leer fluidamente, ¡ya logró crear sus propios cuentos e historietas!
Los encuentros de Ludolecto son motivadores y Charlotte nos cuenta como son:
“Cuando veo que viene la profe Celina me emociono mucho. Me gusta Ludolecto porque jugamos con la profe, jugamos en el parque, cantamos canciones y hacemos palabras de forma divertida. Me gusta mucho el juego de Simón dice y cantar canciones”
El sueño de Charlotte es “ser como la profe Celina” y lo expresa con mucha alegría y ternura: “Cuando sea grande, quiero ser como la profe Celina, quiero ser una profe que trae juegos para jugar con todos”
Ludolecto ha sido de gran apoyo para la profe Gloria y un acompañamiento importante para Charlotte: “Ludolecto nos ayuda mucho en la enseñanza de la escritura, pero también en esa motivación que los niños necesitan a diario para aprender, otro factor es el afecto; eso es lo que les demuestro y veo que también lo hace la profe de Dequení, ese afecto facilita el aprendizaje porque ellos sienten confianza”.
La mayoría de las familias que asisten a la Escuela María Adolfina Lugo, proviene de asentamientos y se dedican a las ventas independientes, por esa razón el acompañamiento a sus hijos muchas veces alcanza el 50%; es un desafío que los docentes enfrentan a diario. A pesar de las circunstancias, los maestros enseñan con entera vocación.
“Cuando los niños sean grandes, deseo que sean personas de bien, útiles a la sociedad, a su comunidad y a su familia”, expresa la profe Gloria.
Antes de despedirnos de Charlotte; nos arrinconamos en el aula para oír su canción favorita; sin duda, ha sido un año de muchos logros en su vida escolar y nos pone muy contentos.
¡Seguí adelante, Charlotte!
Para conocer más y apoyar los proyectos de Dequení y, contactá con Cinthia Sánchez, coordinadora de proyectos de Dequení: csanchez@dequeni.org.py